PEMF (campo electromagnético pulsado) es una terapia natural y segura que se enfoca en curar y restaurar el cuerpo a un estado saludable con energía electromagnética de frecuencia extremadamente baja, similar a la energía que se encuentra en la naturaleza. Los tratamientos PEMF se usan comúnmente para (pero no limitado a) ayudar a curar el tejido y el hueso dañados, aliviar el dolor y promover la recuperación de una lesión. Para obtener más información sobre la ciencia detrás de PEMF, visite nuestra publicación de blog "¿Qué es PEMF?".
Para comprender cómo funciona PEMF para promover un cuerpo sano, es importante conocer el papel que desempeña la energía electromagnética en el cuerpo humano. Las señales eléctricas pulsan constantemente a través del cuerpo, siendo el corazón el principal generador de electricidad. Cada célula del cuerpo necesita energía para funcionar. Esta energía se almacena en las mitocondrias de la célula, la "batería" que alimenta cada célula, que es vital para la salud del cuerpo. La terapia PEMF ayuda a fortalecer estos procesos de curación natural al entregar pulsos electromagnéticos naturales adicionales de baja frecuencia para "cargar" las células, aumentando la energía necesaria para mejorar la función y el metabolismo celular.
La frecuencia terapéutica de PEMF se encuentra en el rango de 5 a 30 Hz, que se encuentra en el extremo extremadamente bajo del espectro electromagnético, similar a las longitudes de onda del campo magnético de la Tierra, lo que lo hace muy seguro.
El campo electromagnético de la Tierra es una fuerza invisible que impacta positivamente e interactúa con todos los seres vivos de la Tierra. Tiene una pulsación de frecuencia promedio de 7,83 hercios, conocida como “resonancia Schumann”, llamada así en honor al físico Dr. Winfried Otto Schumann, quien la predijo matemáticamente en 1952. Curiosamente, 7,83 hercios es también la frecuencia alfa promedio del cerebro humano, que experimentamos. cuando se encuentra en estado de relajación.
Sin este campo electromagnético protector natural, el cuerpo puede sufrir dramáticamente. Esta relación ha sido estudiada por la NASA, que observó la salud de los astronautas cuando estaban lejos de la Tierra y no podían recibir esta fuerza. La investigación encontró que cuando los astronautas regresan a la Tierra después de períodos prolongados, pueden volverse incapaces de mantenerse en pie y/o abandonar la nave espacial sin ayuda. Esto se debe a la atrofia y pérdida de densidad ósea como consecuencia de estar alejados del campo electromagnético de la Tierra. Para evitar que esto ocurra, los astronautas utilizan ahora dispositivos PEMF durante sus misiones espaciales para garantizar que la densidad de los tejidos, huesos y músculos se mantenga fuerte y saludable.
La tecnología PEMF pulsa a bajas frecuencias para atravesar la piel y penetrar profundamente en el cuerpo hasta el nivel celular. Una vez que la célula recibe estas longitudes de onda, su energía se activa, fomentando los mecanismos de reparación naturales. Es probable que las células que han sido dañadas debido a una lesión o trauma hayan perdido carga, por lo que es importante que terapias como PEMF "recarguen" la célula a un estado normal.
Se ha demostrado que el tratamiento constante con PEMF reduce significativamente el dolor porque la curación del tejido dañado se ve influenciada a nivel celular, en comparación con otras estrategias de manejo del dolor que bloquean temporalmente las señales de dolor pero no tratan la causa del dolor.
- Reducir el dolor postoperatorio
- Reducir los dolores musculares
- Reducir los dolores articulares.
- Reducir el dolor nervioso
- Reducir los dolores de cabeza
- Reducir los dolores asociados con la osteoartritis leve de rodilla.
- Reducir los síntomas asociados con la fibromialgia.
- Aumentar la circulación sanguínea.
- Incrementar la reparación muscular
- Aumentar la inmunidad
- Aumentar la capacidad para dormir
- aumentar la circulación