La terapia con láser de baja intensidad se practica cada vez más en el tratamiento del dolor, tanto agudo como crónico. Sin embargo, la mayoría de las personas están más familiarizadas con otras formas de tratamientos con láser, como la depilación láser o los procedimientos quirúrgicos con láser. Entonces cuál es la diferencia?
Un error común sobre la terapia con láser de bajo nivel es que produce calor e incluso puede quemar. A diferencia de los láseres quirúrgicos que se utilizan para extirpar o destruir tejidos o tumores, la intensidad del láser de bajo nivel no es lo suficientemente alta como para producir calor, por lo que no puede quemar ni calentar la piel.
De hecho, hay poca o ninguna sensación durante un tratamiento de terapia con láser de baja intensidad. Si bien es posible que no sienta el láser, el haz de luz de baja intensidad trabaja intensamente debajo de la superficie de la piel, revitalizando el cuerpo a nivel celular.
Los efectos de los tratamientos LLLT incluyen:
- Aumento de la producción de endorfinas para reducir el dolor.
- flujo linfático mejorado para drenar los desechos celulares
- aumento de la circulación
- aumento de la tasa de crecimiento y reparación celular
- reduce la formación de tejido fibroso
- estimula la curación del tejido
Normalmente, los dispositivos láser de bajo nivel utilizan longitudes de onda específicas, entre 600 nm (rojo visible) y 905 nm (infrarrojos). Un haz de luz láser de baja intensidad penetra en el tejido a través de la piel hasta una profundidad específica dependiendo de la longitud de onda.
Las propiedades de la luz láser hacen que sea un haz de luz monocromático, coherente y direccional. Mientras que otras fuentes de luz, como el sol, se dispersan, la luz láser de baja intensidad penetra profundamente, apuntando al lugar del dolor y promoviendo la curación en la fuente.
Los pacientes a menudo experimentan una variedad de beneficios que incluyen: alivio de los espasmos y dolores musculares, reducción de la hinchazón, curación más rápida de las heridas, menos rigidez en las articulaciones con mayor funcionalidad y movimiento y, lo más importante, menos dolor.
Como método no invasivo y, a menudo, más asequible y eficaz para el tratamiento del dolor, la importancia de este tratamiento es enorme. Es necesario comprender más antes de que sea más aceptado y accesible. Sin embargo, hay señales alentadoras de que algún día la terapia con luz láser de baja intensidad se convertirá en algo común.
Otras lecturas:Aplicaciones prácticas de la terapia con láser de baja intensidad una breve revisión de algunos de los conceptos básicos de la terapia con láser de baja intensidad, indicaciones clínicas para su uso y opciones de tratamiento al aplicar láseres terapéuticos a pacientes con dolor. por William J. Kneebone, CRNA, DC, CNC, DIHom, FIAMA, DIACT